
RAFAEL HERNANDEZ MARÍN
Rafael Hernández Marín fue un compositor e intérprete de música popular nacido en Aguadilla, Puerto Rico, en el 1892. A temprana edad estudió música con el maestro José Rullán Lequerica y más tarde, prosiguió estudios bajo la dirección de Don Manuel Tizol. Al estallar la Primera Guerra Mundial, sirvió en el ejercito de los EE. UU. A su regreso se estableció en Nueva York y más tarde, residió en Cuba, México y Puerto Rico; en Cuba dirigió una orquesta de teatro. En 1922 regresó a EE. UU. y fundó el Trío Borinquen, con el que recorrió buena parte del mundo hispanoamericano. De nuevo en Nueva York organizó el Cuarteto Victoria, con el que daría a conocer las canciones que lo inmortalizaron. Sus primeras composiciones importantes surgen de los versos de poetas insignes del país (A mis amigos, de Gautier Benítez; Laura Mía, de José de Diego y de otros) a los que pondrá música y popularizará en todas las latitudes. El resto de sus canciones se centrarán en los temas de la mujer, la patria, el amor, la nostalgia de la tierra, etc. Rafael Hernández cultivó todos los géneros, desde la danza clásica y romanza hasta la plena y el bolero; desde himnos y música de zarzuela hasta la rumba y el danzón. Se le recuerda por sus inmortales composiciones de genero popular: Campanitas de Cristal, El Cumbanchero, Lamento Borincano, Los Carreteros, Borinquen Me Llama, Ausencia y Preciosa, entre otras. A fines de la década del 1940, compone música navideña y Cofresí, una zarzuela con letra de Luis Palés Matos. Hasta el final de su vida continuó con el estudio de la música.